Son lesiones comunes en la infancia localizadas a nivel de la línea media del cuello y en la “cola de las cejas”; también pueden observarse en la frente, puente nasal, y a nivel del cuero cabelludo. Se caracterizan porque poseen material sebáceo en su cavidad, de allí que sean conocidos como “quistes sebáceos” (Fig. N°1b). Son lesiones redondeadas, móviles, indoloras, de consistencia firme, bien delimitadas, adheridas a la piel, y generalmente pequeñas (Fig. N°1a). El diagnóstico es sospechado sobre la base de los hallazgos clínicos. El tratamiento consiste en la escisión quirúrgica del quiste cuando se realiza el diagnóstico.